El conocimiento indígena y el financiamiento directo son pilares de la adaptación climática
El Debate de Alto Nivel en la COP30 demostró que los planes de resiliencia gubernamentales deben incluir las experiencias de los pueblos originarios. La garantía del derecho al territorio y la facilitación del acceso a los recursos también son señaladas como claves para la implementación

Por Laura Marques/COP30
La participación de los pueblos indígenas en la elaboración de los Planes Nacionales de Adaptación (NAPs), junto con la protección de los territorios y el financiamiento climático directo para estas comunidades, se considera fundamental para enfrentar el cambio climático. Estos temas fueron tratados durante el evento de Alto Nivel/Ministerial “Adaptación Indígena”, realizado el miércoles 12/11 en la COP30.
Para la anfitriona de la sesión y Enviada Especial de la COP30, Sineia do Vale, el modo de vida y la sabiduría indígena son esenciales para el cumplimiento del Acuerdo de París y de otras metas climáticas. “Los pueblos realizan un trabajo milenario en sus territorios, aportando soluciones frente al cambio climático. Es importante que puedan continuar con su modo de vida”, destacó.
El representante del Comité de Adaptación de la Secretaría de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (UNFCCC), Carlos Ruiz-Garvia, reiteró la posición de la anfitriona y recordó que varios acuerdos multilaterales reconocen el papel de los pueblos originarios en este tema, como el Acuerdo de París, el Convenio sobre la Diversidad Biológica y el Objetivo Global de Adaptación, establecido en la COP28.
Financiación
Los participantes coincidieron en que garantizar la transferencia directa de recursos a las acciones de los pueblos indígenas es una medida prioritaria para preservar sus modos de vida, fundamentales para el equilibrio climático.

El Fondo Verde para el Clima (GCF, por sus siglas en inglés), principal mecanismo mundial de financiamiento climático, también trabaja para asegurar que los pueblos indígenas tengan acceso directo a los recursos destinados a la adaptación y mitigación.
“Nuestro objetivo no solo es evitar los daños que afectan a los pueblos indígenas, sino también garantizar que estos pueblos se beneficien del financiamiento climático”, enfatizó el director de Asuntos de Gobernanza y secretario del Consejo del GCF, Artur Lacerda.
Además, la representante de la Iniciativa Noruega para el Clima y los Bosques (NICFI, por sus siglas en inglés), Lívia Tráeme, afirmó que Noruega recomienda que los países elaboren políticas de financiamiento climático con la participación de representantes indígenas.
Kraemer citó el Fondo de Bosques Tropicales para Siempre (TFFF, por sus siglas en inglés) como un mecanismo ejemplar. El país europeo anunció su mayor aporte al fondo (3 mil millones de dólares), que se encuentra entre los mayores fondos climáticos del mundo.
Derecho al territorio
La protección de los territorios de los pueblos originarios también fue un tema abordado en el evento. Según el coordinador de la Cuenca Amazónica en la International Land and Forest Tenure Facility (Instalación Internacional de Tenencia de la Tierra y los Bosques), David Kaimowitz, esta es una condición esencial para el cumplimiento de las metas climáticas.
El especialista es autor de un estudio de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), que señala que los pueblos indígenas y las comunidades tradicionales son los mejores guardianes de los bosques.
Buenas prácticas
Las prácticas lideradas por los pueblos indígenas en Roraima resultaron en un plan de adaptación que será presentado el viernes 14/11 en la COP30. La iniciativa está encabezada por Sineia do Vale, quien es copresidenta del Foro Internacional de los Pueblos Indígenas sobre Cambio Climático (IIPFCC) y coordinadora del Departamento de Gestión Territorial, Ambiental y de Cambio Climático del Consejo Indígena de Roraima (CIR).
“Los pueblos aportan indicadores naturales para mostrar cómo los impactos del cambio climático ya afectan la vida cultural y social de las comunidades”, comentó Sineia.
El documento es uno de los pocos planes de adaptación indígena en el mundo y el tercero en Brasil. Reúne conocimientos como la identificación de semillas más resistentes a las estaciones del año y la relación entre la temperatura del agua y la presencia o ausencia de peces nativos.
Versión en español: Mariana De Santi (POET/UFC)
Revisado por: Enora Lessinger (POET/UFC)
