COP30

Nota de la presidencia de la COP30 sobre el fallecimiento del Papa Francisco

“No hay dos crisis separadas, una ambiental y otra social, sino una sola y compleja crisis socioambiental”, escribió el Papa Francisco en la carta encíclica Laudato si’, la primera encíclica papal sobre el medio ambiente. La respuesta al cambio climático, afirmó acertadamente el Pontífice, requiere “una aproximación integral para combatir la pobreza, para devolver la dignidad a los excluidos y simultáneamente para cuidar la naturaleza.”

El Papa Francisco no solo ha sido un ejemplo de dignidad humana, respeto y acogida, sino también un activista climático, defensor de la naturaleza, los bosques y los pueblos indígenas y comunidades tradicionales. La encíclica Laudato si’, publicada en 2015, y su defensa de una ecología integral inspiraron el consenso que, pocos meses después, permitió la adopción del histórico Acuerdo de París.

El cambio climático, como bien reconoce Francisco, es un acelerador de la pobreza, la desigualdad y el sufrimiento, y su lucha debe ser integral y guiada por la solidaridad. Si nada en este mundo nos es indiferente, el futuro de nuestra casa común depende urgentemente de una acción colectiva rápida, inclusiva y eficaz.

Que las enseñanzas del Papa Francisco y su valiente liderazgo nos sirvan de ejemplo en un momento clave para acelerar la aplicación del Acuerdo de París y las soluciones climáticas. Su legado nos inspirará en la COP30 y en la movilización de un esfuerzo global para combatir el cambio climático sin dejar a nadie atrás.