Lula: “Belém será el lugar donde renovaremos nuestro compromiso con el Acuerdo de París”

En una sesión temática por los diez años del compromiso internacional para limitar el calentamiento de la Tierra, el presidente brasileño pidió celeridad para implementar el Acuerdo. También llamó la atención sobre la necesidad de financiamiento climático para los países en desarrollo

Por Mayara Souto / COP30

La última sesión de la Cúpula del Clima de Belém, este martes 7 de noviembre, invitó a los líderes a reflexionar sobre los diez años del Acuerdo de París, que prevé esfuerzos para limitar el calentamiento de la Tierra a 1,5 ºC. En su discurso de apertura, el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, reforzó su intención de avanzar en la implementación del compromiso internacional durante la COP30, así como en el financiamiento climático necesario para ello.

“En lo que dependa de Brasil, Belém será el lugar donde renovaremos nuestro compromiso con el Acuerdo de París. Esto significa no solo implementar lo ya acordado, sino también adoptar medidas adicionales capaces de cerrar la brecha entre la retórica y la realidad”, inició el presidente brasileño.

Para ello, Lula destacó la importancia de que los países presenten Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional (NDC, por sus siglas en inglés) ambiciosas, con el fin de limitar efectivamente el calentamiento global a 1,5 ºC, especialmente aquellas naciones que históricamente más emiten gases de efecto invernadero.

“Podemos avanzar hacia el futuro sin dejar de exigir a quienes más se beneficiaron históricamente de las emisiones que asuman sus responsabilidades. En América Latina, Asia y África están las regiones que corren el riesgo de volverse inhabitables. En el Caribe y el Pacífico están las islas que pueden desaparecer. Omitirse es sentenciar nuevamente a quienes ya son los condenados de la Tierra”, lamentó el presidente brasileño.

El secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, explicó que las NDC han funcionado como una especie de “termómetro” de la ambición climática de los países. Sin embargo, no han sido suficientes en esta primera década del Acuerdo. Según él, para alcanzar la meta de 1,5 ºC sería necesario reducir en un 60 % las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero hasta 2035.

“Las nuevas NDC solo representan una reducción del 10 %. Necesitamos un plan de aceleración para cerrar las brechas de ambición e implementación de las NDC. Y esa aceleración debe comenzar aquí en Belém”, subrayó el representante de la ONU.

Financiamiento climático

Durante la sesión, los países en desarrollo expusieron los desafíos que enfrentan para implementar medidas de combate al cambio climático. Representantes de los Pequeños Estados Insulares (SIDS, por sus siglas en inglés), por ejemplo, solicitaron apoyo de las principales economías, ya que vienen siendo duramente afectados por eventos climáticos extremos.

Lula defendió la conclusión del Mapa de Ruta de Bakú a Belém para alcanzar 1,3 billones de dólares anuales en financiamiento climático hasta 2035 para los países en desarrollo. Las presidencias de la COP29, de Azerbaiyán, y de la COP30, de Brasil, presentaron el plan para alcanzar esa inversión el pasado miércoles 5 de noviembre.

“Sin medios adecuados de implementación, exigir ambición a los países en desarrollo es injusto e irrealista. El Mapa de Ruta de Bakú a Belém muestra que, con voluntad política, tenemos alternativas para alcanzar la meta de 1,3 billones de dólares por año”, destacó el presidente brasileño, reafirmando que solo una pequeña parte del financiamiento climático llega al Sur Global.

Ante ese panorama, el secretario general António Guterres mencionó que el Mapa de Ruta tiene como misión “restaurar la confianza en que el financiamiento climático fluirá de manera previsible, justa y a escala”.

“Deben desarrollarse formas innovadoras de financiamiento, incluyendo canjes de deuda por clima, mecanismos de reparto de riesgos e instrumentos audaces como el Fondo Bosque Tropical para Siempre, sin olvidar la contribución de los mercados de carbono. Y debemos seguir presionando por reformas en la arquitectura financiera global, para que refleje el mundo actual y atienda las necesidades de los países en desarrollo”, afirmó.

Lula y Guterres, finalmente, hicieron un llamado a la acción climática para los países y pidieron reafirmar el compromiso asumido. “En la COP30, renovaremos la gran promesa que el mundo hizo hace una década en París, iniciando una nueva década de implementación y aceleración”, dijo el secretario general.

“En lugar de abandonar las esperanzas, podemos construir juntos una nueva era de prosperidad e igualdad”, concluyó el presidente de Brasil.

Versión en español: Mariana De Santi (POET/UFC)
Revisado por: Enora Lessinger (POET/UFC)