De Río-92 a la COP30: Brasil impulsa el diálogo internacional por una gobernanza medioambiental integrada

La acción sistémica, reconociendo sinergias entre convenciones medioambientales, fue el eje de un evento promovido por la presidencia brasileña de la COP30. En una reunión preparatoria en Bonn, Alemania, Brasil coordina esfuerzos para revitalizar el multilateralismo en la agenda climática

Por Franciéli Barcellos de Moraes | COP30

En el marco de las agendas de la 62.ª sesión de los Órganos Subsidiarios de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (SB62), en la ciudad alemana de Bonn, la presidencia brasileña de la COP30 coordinó una mesa especial sobre sinergias entre las tres convenciones de Río y la Conferencia de noviembre. El resultado de los debates arrojó un mensaje claro: la acción climática necesita volverse más sistémica con urgencia. De forma aislada, los objetivos no se lograrán.

Si bien este año, por primera vez, el evento más importante del calendario climático de la ONU se celebrará en la región amazónica, no es novedoso el protagonismo de Brasil en este tema. Hace 32 años, en Río de Janeiro, tuvo lugar la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Medio Ambiente y Desarrollo (CNUMAD), también conocida como Río-92. Este encuentro se considera un marco en la historia de los compromisos internacionales en la agenda ambiental y dio origen a dos eventos de continuidad: Río+10 (Johannesburgo, Sudáfrica, 2002) y Río+20 (Río de Janeiro, Brasil, 2012).

En la reunión celebrada en la antigua capital de Alemania Occidental, preparatoria para la Conferencia en Belém, capital del estado de Pará, Ana Toni, directora ejecutiva de la COP30, lideró la actividad. La iniciativa se basó en la comprensión de que dicha sinergia es esencial para afrontar los desafíos ambientales globales de forma integrada, especialmente en el contexto de los bosques y la crisis climática. La diplomacia brasileña, desde su tradición de cordialidad, diálogo y cooperación, busca fortalecer las estructuras multilaterales para trazar hojas de ruta que permitan superar la fragmentación actual de la gobernanza medioambiental internacional.

“El regreso a Brasil en la COP30 no es solo simbólico. Es un poderoso recordatorio de la base común que dio origen a las tres convenciones de Río. Esa base compartida nos impulsa a actuar con mayor coherencia, eficacia y urgencia en las agendas de clima, biodiversidad y uso de la tierra”, destacó el Dr. Osama Faqeeha, viceministro de Medio Ambiente del Ministerio de Medio Ambiente, Agua y Agricultura de Arabia Saudita y asesor de la presidencia de la COP16 de Riad, celebrada el año pasado.

Las contribuciones, tanto de los especialistas de agencias de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) como de los países representados en la mesa, coincidieron en que fortalecer la integración entre las agendas ambientales — clima, océanos, tierra y biodiversidad — es, además de una urgencia social, un factor capaz de maximizar resultados con los mismos recursos. Otros puntos destacados fueron la valorización de estrategias basadas en la naturaleza y enfoques ecosistémicos, así como la necesidad de una mayor participación del sector privado en la búsqueda de soluciones, dado que es responsable de una parte considerable de los recursos naturales del planeta.

"Hijos de Río-92"

Los compromisos asumidos en Río-92 no solo fueron fundamentales para la creación de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (UNFCCC, por sus siglas en inglés), que sentó las bases para la cooperación internacional frente a la crisis climática y que hoy lidera el evento en Bonn. El encuentro en Río de Janeiro también allanó el camino para la fundación de la Convención sobre la Diversidad Biológica (CBD, por sus siglas en inglés) y la Convención de las Naciones Unidas de Lucha contra la Desertificación (UNCCD, por sus siglas en inglés), ambas representadas en el debate.

“Realmente debemos abordar todos estos temas de forma holística, dentro de todo el marco, prestando atención a las comunidades y pueblos específicos. Debemos considerar los diferentes sectores, reconociendo que el tema no se limita a las pequeñas oficinas de los ministerios de Medio Ambiente, sino que debe involucrar a todo el Gobierno y a toda la sociedad”, afirmó Tristan Tyrell, del secretariado de la CBD.

Birguy Diallo, jefa de Política Global, Incidencia y Cooperación Regional de la UNCCD, destacó que no hay tiempo para esperar una arquitectura institucional perfecta a nivel internacional o local para actuar. “Muchas veces vemos la tierra como un espacio de competencia — por recursos, atención política, control institucional. Sin embargo, podemos utilizarla como un vínculo para construir realmente estas sinergias”, concluyó.

Bonn 2025

La SB62 se desarrolla hasta el 26 de junio, compuesta por el SBSTA (asesoría científica y tecnológica) y el SBI (responsable de la implementación de acuerdos). La reunión en Bonn se celebra anualmente y alberga a 18 agencias de las Naciones Unidas, entre ellas la secretaría de la UNFCCC.

Versión en español: Trad. Kaique Ortiz.
Revisión: Enrique Villamil.